Retellings, de Shakespeare a Sarah J. Maas
¿Qué es un retelling?
La palabra «retelling» viene del inglés y quiere decir «volver a contar», y esto es lo que hace el autor: tomar una historia que le llama la atención y hacerla suya. A grandes rasgos: una reinterpretación de una historia ya existente.
Por poner un ejemplo
La idea es que la estructura del retelling mantiene la misma o una de similar a aquella de la que bebe.
Supón que tenemos a una joven cyborg que tiene, entre otros, un pie de metal. Esta cyborg es mecánica y un día el príncipe va a su taller para pedirle que arregle una androide y ahí los dos tienen un primer contacto en el que se sienten atraídos el uno por el otro. Además, este príncipe hace un baile anual donde pueden ir todos los habitantes del reino. ¿Te suena? En este caso, estaríamos ante una estructura muy similar al cuento clásico de la cenicienta, sin embargo, en un mundo completamente distinto y, aunque ciertos eventos de la trama que característicos de la historia clásica se mantienen, nuestra historia podría ser muy, pero que muy distinta. Bueno, pues este ejemplo que he puesto no me lo he inventado, sino que de aquí parte la historia de Cinder, de Marissa Meyer y como has adivinado, es un retelling de cenicienta.
La idea tras los retellings es aprovechar tramas que siempre nos han gustado y que no nos cansamos de escuchar, y usarlas para crear algo nuevo, fresco y emocionante. Se trata de tomar un relato conocido y darle un giro, ya sea cambiando la perspectiva o el género, ampliando la historia, haciendo protagonista a otro de los personajes… Las opciones son infinitas.
Un vistazo histórico
Los retellings no son un invento moderno. Shakespeare, considerado uno de los grandes genios de la literatura, solía basar sus obras en relatos ya existentes, como en Hamlet (1602), que se inspira en una crónica medieval de Saxo Grammaticus, escrita alrededor del año 1200. La historia original cuenta la venganza del príncipe Amleth por el asesinato de su padre a manos de su tío Feng, quien además se casa con la madre de Amleth. Visto así, más que una inspiración parecería un plagio. Sin embargo, ¿por qué no se considera plagio? Pues porque el “autor” (hay dudas sobre su autoría) desarrolla una obra sobre la identidad y la cultura de la que carecía la original.
Así que, aunque el término retelling sea relativamente nuevo y puede que Sarah J. Maas y Marissa Meyer lo hayan puesto de moda, la idea de tomar elementos ya existentes en otras historias y reinterpretarlos lleva existiendo desde el principio de los tiempos.
¿Por qué se han puesto de moda los retellings?
Debido a una mezcla adictiva de familiaridad y novedad en la historia. Eliminan gran parte de la desubicación inicial al empezar a leer, y a la vez te ofrece elementos refrescantes sobre un cuento que creías conocer.
¡Si a ti también te gustan y te apetecería que hiciera un post recomendando mis retellings favoritos, déjamelo en los comentarios!